Comenzar una carrera como wedding planner puede sonar glamuroso, pero para nuestra protagonista fue una completa locura. En noviembre de 2011, recién graduada de la universidad y sin experiencia, Isabela Katime recibió la inesperada propuesta de organizar la boda de su prima.

Lo que comenzó como un reto solitario, hoy, 13 años después, es un exitoso camino junto a un equipo que la respalda. Esto fue lo que conversó con nosotros en EL DIÁLOGO. (Entrevista en Youtube)

Fotografías cortesía Isa Katime Wedding Planner

¿Quién quiere casarse en estos tiempos?

La boda es un momento mágico para el que tiene la ilusión de verdad de casarse, de comprometerse. Porque, por supuesto, el matrimonio va mucho más allá de hacer un evento.

¿Cuáles son las funciones de un wedding planner?

Digamos que el wedding planner se encarga de poner todas las fichas en orden. Como poner a todos los proveedores en completa sincronía para que el evento funcione tal como se ha planeado o mucho mejor. Entonces es contemplar las cotizaciones, los contratos, que este personaje tiene que actuar a tal hora, que en este momento tenemos que poner la cena, que hay que destinar un espacio para las cosas. Hay que tener como muchos detalles, muchos elementos.  Es decir, yo me encargo de cotizar a Silvestre Dangond  con su manager y concretarlo, por ejemplo.

¿Te estresas mucho organizando estos eventos?

Hay algunas situaciones en las que uno dice como de verdad hago lo humanamente posible porque todo esto salga de la mejor forma, pero hay cosas que definitivamente yo no controlo, como el clima, no soy chamán. Digamos que de un tiempo para acá ya no me estreso por cosas que no puedo controlar. Sí, definitivamente la lluvia es algo que no puedo controlar.

¿Cuál es el porcentaje de éxito de una boda? 

De hecho, lo que le digo a los novios es que como venga, como el cielo o el universo, Dios, Alá, Rá, en lo que tu creas te lo mandó, así disfrútalo, porque pues al final es un momento de verdad de un todo o nada. Entonces o te lo disfrutas o no, y el 80% de las bodas son actitud de los anfitriones.

¿Cuáles son los destinos preferidos de la gente para casarse en el país?

Ya hay varios destinos identificados Cartagena, el Eje Cafetero, Villa de Leyva, digamos que son destinos ya consolidados. Santa Marta, por supuesto, no se queda atrás. Nosotros estamos en el listado, y pues con buenas noticias que se nos vienen para el otro año. 

¿Santa Marta será sede de un evento internacional?

Recibimos la excelente noticia de que Santa Marta va a ser sede del primer Wedding Summit, que es un evento de la industria de bodas que se hace anualmente en una ciudad de México y en una ciudad de Colombia. Había rumores de que no iba a continuar en Colombia, pero por fortuna nos anunciaron que definitivamente se iba a continuar, e iba a ser Santa Marta y además nos va a coincidir con los 500 años en el 2025.

¿Cuál es la diferencia entre un matrimonio costeño y uno cachaco?

El del interior busca mucho esta zona del del país, pues justamente porque siempre ha querido casarse en playa o quiere atardecer, estilo novelero, mientras que el costeño tradicional busca aire acondicionado.

¿Cómo es organizar una boda en los Estados Unidos?

Allá fue un reto grandísimo, empezando por el tema de los mismos proveedores, aquí somos más cálidos, siento que nosotros tenemos como un plus, con ese don de servicio que tenemos acá en Colombia. Recuerdo cuando llegué a Estados Unidos e hice esa boda, todo era como tan todo muy bonito, pero digamos que las bodas acaban temprano y los proveedores van exclusivamente a hacer lo que le contrataste y nada más. No puedes pedir una ayuda extra, entonces uno como que es un poco más cálido en ese sentido, que es más empático.

Me caso dentro de un mes y tengo 2 millones de pesos ¿para qué me alcanza?

(Risas) Eso ya lo hablamos detrás de micrófono te alcanza para una arroz de chipi-chipi y para  una bigcola (risas). La gente se puede casar con 2 millones de pesos, pero lo único que hay que hacer es aterrizar las ideas. 

¿Qué es lo más curioso que te ha pasado en una boda?

Bueno, digamos, qué curioso, o más bien un poco loco, una solicitud un poco loca, que los novios querían un panda, porque se decían panda el uno al otro de puro cariño. Pues claramente no me iba a traer una panda de verdad, entonces decidimos contratar a una gente de la hora loca para que se pusiera esas cabezotas de panda. Y estuvieron alicorando a todos los invitados. 

¿Las bodas impulsan la economía de las ciudades donde se realizan?

Hemos decidido sumar esfuerzos y hay fotógrafos, hay productores, hay catering. Es un grupo variado. Las bodas son un motor de la economía es innegable. Generamos muchos empleos directos, indirectos. 

¿Cuáles son las mejores fechas para casarse?

El diciembre es un mes movido para nosotros en la industria de bodas, pero es más porque muchas personas dicen ay, yo quiero casarme en esta época, porque resulta que mi familia sale de vacaciones, porque es cuando más pueden llegar a al lugar donde me quiero casar, etcétera, etcétera entonces escogen diciembre y por lo general para los extranjeros es entre  julio y agosto, porque son por lo general las vacaciones largas de ello.

Son normales las estafas con las bodas

Lamentablemente, como en cualquier industria, existen casos de estafa. Siempre recomiendo a los novios investigar y pedir referencias antes de contratar cualquier proveedor. Hace poco, junto con otros colegas, publicamos un comunicado para alertar a las parejas sobre algunos casos y la importancia de denunciar. Esto permite que quienes trabajamos honestamente tengamos las herramientas necesarias para proteger a nuestros clientes y a la industria.

¿Qué consejo les darías a las parejas que están planeando su boda? 

Mi consejo principal es que disfruten de cada paso del proceso. Desde la planificación hasta el gran día, cada momento es especial. También, recordar que más allá de lo material, lo importante es la unión y el compromiso que están celebrando. Si disfrutan y confían en su equipo de trabajo, seguro su boda será un éxito.